Posiblemente os hayáis enterado ya de que en Francia
( es que siempre van por delante, da rabia 😉 ) ha entrado en vigor una ley de desconexión del trabajo, que aunque no parece que deja claro cómo se va a implementar, tiene el objetivo que su nombre indica.
Así, habla del derecho a la desconexión, y las empresas deberán poner en marcha medidas de regulación de los medios digitales como el correo electrónico, con el objetivo de respetar el tiempo de vacaciones y descanso, y mantener el equilibrio entre vida profesional y personal.
En Francia están especialmente preocupados por los riesgos psicosociales del trabajo ( ¿recordáis lo de los suicidios de France Telecom? ) y se refleja hasta en las películas que hacen.
Pues yo…. No estoy de acuerdo!
Vida profesional y personal
Esto lo veo como la salud laboral y la personal. Una diferenciación bastante ficticia en mi opinión, porque la salud es una. Es cierto que hay factores que la afectan ambientales y de otros tipos según que estemos en el trabajo o no, pero no siempre es posible ni deseable establecer una clara división completa.
¿Que es conciliar?
Es hacer compatibles dos o más cosas.
Para mí la conciliación se optimiza con flexibilidad. En el más amplio sentido, casi hasta mezclar actividades profesionales y personales según convenga al trabajador y a la empresa. Una especie de win-win logrado gracias a ofrecer disponibilidad casi absoluta para flexibilizar tiempos, horarios y formas de trabajo.
No es tanto salir de trabajar a las cinco para tener el resto del día libre, como salir hoy a las dos porque voy a recoger al niño o a ver un partido de fútbol de mi equipo; y salir mañana en cambio a las ocho porque no tengo ningún plan y estoy a tiempo para entregar el proyecto.
Felicidad en el trabajo
De esto se habla bastante, aunque también hay quien dice que se nos ha ido la mano y eso del Ge-Fe (Gestor de Felicidad) en vez del jefe de toda la vida es una especie de absurda utopía.
Quizás, pero todos sabemos que como el refrán happy wife, happy life, si uno trabaja contento es mejor para su empresa. Y para uno mismo más.
Happy job, happy life
Tanta conexión nos estresa !
No es de extrañar, quién no se ha sentido a veces casi sobrepasado por tanta disponibilidad, accesibilidad, infoxicación y conexión como tenemos. Pero ¿es la solución evitarlo por imposición?
No en mi opinión, porque va diametralmente en contra de lo que yo entiendo por conciliación como flexibilización y que cada cual pueda ser libre de organizarse sus conexiones y por tanto su trabajo como mejor le convenga. Pienso que el objetivo debe ser este, y si lo logramos una ley de desconexión no tendrá sentido.
Necesitamos conexiones que ayuden a conciliar/flexibilizar
El problema es que la palabra «flexibilidad», en teoría muy bonita, es extremadamente peligrosa en el mundo real. La flexibilidad, para que funcione, se tiene que basar en un «hoy por ti, mañana por mí», pero muchas veces lo que existe es un «hoy por ti, mañana también por ti». En mi opinión y aunque habrá de todo, por desgracia cuando un jefe le habla a un subordinado de «flexibilidad» quiere decir que el jefe tiene flexibilidad y el subordinado tiene que estar disponible al cualquier hora que el jefe le requiera.
Hola guapa !
Seguro que por casos como los que dices es por lo que han hecho la ley. Esperemos que la difusión de su promulgación sirva para que algunos recapaciten o al menos piensen en ello.
Pienso que la flexibilidad es posible y necesaria además. Y que ese mundo real del que hablas es tan real y tan diferente a la vez en un país como el nuestro y en Suecia, por ejemplo.
Si a ellos les funciona, y nos consta que sí, nos debería faltar tiempo para implementar esa flexibilidad.
No creo en los cambios culturales poco a poco cuando la necesidad es apremiante. En cuestiones como esta, o el acoso, o la discriminación de género hay que producir el cambio. Si es preciso legislando, como consiguieron las mujeres en Islandia.
Pero como decía, si ya tenemos el ejemplo no debería ser necesario gastar tiempo y recursos en legislar, en mi opinión.
Un besazo
Brillante Blanca¡¡
Mezclar actividades profesionales y personales según convenga al trabajador y a la empresa requiere un alto grado de responsabilidad y compromiso por parte del trabajador y de la empresa. Requiere generosidad y agradecimiento por parte de ambos.
Andamos escasos unos y otros. Hace falta vista de pájaro, como la tuya¡
Vaya pájara estás hecha 🙂
Jajajajaja
Gracias guapa.
Yo pienso que lo más frecuente es la responsabilidad y la generosidad. Aunque quizás culturalmente, en el sentido que dice Idoia, Suecia y nuestro país sean algo diferentes.
Si ambas partes vieran las ventajas de la flexibilidad, en la que personalmente creo, todo sería más fácil.
Besos !
Mi experiencia en una empresa pública (el Sistema Nacional de Salud, versión SACYL) es que a dicha empresa y sus directivos les importa menos que nada tu vida fuera del trabajo y tu salud. Lo único que les preocupa es que tú hagas cada vez más cosas por el mismo salario y si te quejas o te pones enfermo, eres un flojo y un vago. Muy triste en un Servicio Público especialmente sensible.
Buenos días Julio.
Muy triste y muy poco inteligente. Habría que mirar lo que hacen otros a nuestro alrededor, preocupados cada vez más por la situación de sus empleados/profesionales sanitarios y por las implicaciones sobre el trabajo que realizan.
Hay quien tiene hasta Servicio de Bienestar del Médico. Por algo será.
Un beso, gracias por comentar.