La salud como estado completo de bienestar físico, psíquico y social, y no solo la ausencia de enfermedad es, además de la definición de la OMS en 1948, una ambición loable en el momento histórico en el que se formuló.
Casi recién salidos de la Segunda Guerra Mundial, y en los albores de la era antibiótica, el mundo vivía un momento histórico en el que la práctica de la Medicina cambió radicalmente, y la OMS pensó que se podía y debía aspirar a más que la ausencia de enfermedad en cuanto a salud en la población mundial.
La esperanza de vida ha aumentado enormemente desde que se formuló la definición anterior. Esto conlleva indefectiblemente la aparición de las enfermedades ligadas al envejecimiento, que ahora mismo son la principal causa de muerte en el mundo.
Los procesos fisiológicos, no ya las enfermedades que conlleva envejecer, no suponen precisamente bienestar, lo que hace la definición un tanto inalcanzable.
Además. el estado de bienestar con carácter permanente, es impensable en el transcurso natural de la vida.
Hoy en día hay quien cree (yo también) que es necesaria otra definición.
El Dr. Alejandro Jadad, propone esta: salud es la capacidad de adaptarse y manejar los desafíos en los campos físico, psíquico y social que acontecen en la vida de las personas.
Etimológicamente, la palabra salud tendría en este sentido el significado de salvar obstáculos, más acorde con esta nueva acepción.
La trascendencia de asumir uno u otro concepto es grande. En escasez de recursos, puedo elegir destinarlos a salud y no a bienestar, si realmente no son lo mismo. O si por el contrario preferimos considerar un todo bienestar y salud, no distinguiremos dónde emplearlos.
Además, podemos atribuir características de bienestar o salud, indistintamente, a productos de la industria en sus reclamos. O por el contrario, como ciudadanos, podemos exigir diferenciar si lo que adquirimos nos va a ayudar a adaptarnos a una circunstancia desfavorable (Jadad) o va a contribuir a nuestro bienestar o incluso a prevenir enfermedad.
No es que sea menos o más importante. Es que, en mi opinión, es distinto.
(Continuará)